La actividad, organizada por el programa Vivo Curimón de la Fundación Lepe, en conjunto con la municipalidad de Rinconada, se enmarcó en la celebración del Día de los Patrimonios. Participaron más de 50 ciclistas de diferentes localidades del Valle del Aconcagua.
El fin de semana del 28 y 29 de mayo se realizó, a lo largo del país, una nueva celebración del Día de los Patrimonios. Este año, a diferencia del anterior que estuvo marcado por la pandemia, la Municipalidad de Rinconada en conjunto con el programa Vivo Curimón de la Fundación Lepe, tuvo una entretenida invitación a quienes les gusta el deporte. Se trató de la Cicletada Patrimonial, una actividad que recorrió los principales hitos patrimoniales entre Curimón y Rinconada.
Fueron 11 estaciones donde los participantes pudieron conocer, entre otra cosas, la iglesia de Curimón y el convento que datan de 1713, la casa donde vivió Carmela Carvajal luego de enviudar, o lugares donde estuvo el Ejercito Libertador antes de la Batalla de Chacabuco.
El Alcalde de la Comuna de Rinconada, Juan Galdames, destacó que “esta cicletada tuvo como fin ir recorriendo y conociendo los lugares patrimoniales. Se trató de hacer vida sana, vida activa y que fuese una actividad familiar”.
Por su parte, la coordinadora del Programa Vivo Curimón de la Fundación Lepe, Dazma Guzmán, explicó que “la Cicletada Patrimonial vino a cerrar una serie de actividades que hemos realizado durante todo el mes de mayo, donde hemos conmemorado el Día de los Patrimonios. Con esta actividad de cierre se buscó poner en valor el patrimonio biocultural de la zona y potenciar el desarrollo del turismo cultural mostrando a la comunidad algunos hitos patrimoniales que muchas veces no se conocen”.
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